A no ser que tengamos un huerto en casa o compremos todo en un mercado ecológico (es más caro), la realidad es que diariamente estamos en contacto con numerosos productos químicos en nuestras verduras y frutas. Los pesticidas, sumados a las ceras y abrillantadores, hacen de las verduras y frutas productos con una apariencia casi artificial.
¿Qué son los pesticidas?
Los pesticidas son productos químicos o biológicos que se emplean sobre frutas y verduras para protegerlos de los insectos, malas hierbas y las enfermedades.
Aunque puede parecer que son necesarios, muchos de estos plaguicidas contienen sustancias sumamente tóxicas para los humanos.
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria realiza exámenes periódicos de los productos que hay en el mercado, y en el último que este organismo hizo en España comprobó que el 95 por ciento de las muestras analizadas eran seguras para el consumidor.
¿Cómo podemos eliminarlos en casa?
Para reducir los restos de pesticidas que contienen los vegetales, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, recomienda adoptar una serie de medidas:
- Lavar frutas y verduras bajo el chorro de agua, aunque se pelen, porque así se evita que la contaminación pase al cuchillo.
- Usar un cepillo especial en el lavado de las frutas y las verduras de cáscara (melón, sandía, pepino, calabacín, etc.).
- Secar con papel de cocina.
- Si la fruta o la verdura se consume cruda o cocida con piel, sumergir durante cinco minutos en un recipiente con agua y lejía en proporción de una cucharada de postre de lejía por tres litros de agua, y aclarar. La lejía debe estar etiquetada como “apta para la desinfección de agua de bebida”. También se puede sustituir la lejía, por vinagre de manzana o blanco.
Si se siguen estas recomendaciones y además se pela la fruta, se conseguirá eliminar una gran parte de los residuos que las frutas y verduras puedan contener.
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