Los alérgenos alimentarios son compuestos que pueden encontrarse en los alimentos que consumimos y dañan la salud de las personas sensibles a ellos. Son sustancias que en un principio son inocuas, pero que provocan una reacción exacerbada del sistema inmunológico en algunos consumidores.
Además, algunas sustancias no afectan al sistema inmunológico pero pueden producir reacciones adversas en algunas personas. Consumir accidentalmente alimentos que contengan estos compuestos puede acarrear alergias e intolerancias con distinta gravedad hasta el punto de comprometer la vida en algunos casos.
Según el Reglamento 1169/2011sobre información alimentaria, los establecimientos que se dediquen a la hostelería o que sirvan alimentos y bebidas no envasadas a sus clientes están obligados a informar a los consumidores si contienen alguno de los 14 alérgenos de declaración obligatoria recogidos en la normativa.
A pesar del tiempo que llevamos hablando de alérgenos, son muchos los establecimientos que siguen sin tomar las medidas adecuadas al respecto, poniendo así en riesgo la salud de sus clientes.
A continuación os indicamos las malas prácticas habituales que se adoptan en algunos establecimientos.
En pequeños bares y restaurantes se tiende a freír diferentes productos en una misma freidora. Ello supone un riesgo potencial de que los alérgenos de un alimento, -que normalmente son proteínas-, puedan ser transferidos al aceite, y después a otro producto frito a posteriori.
Con ello se incurre en la contaminación cruzada de diferentes alérgenos a productos que no los contenían en su etiqueta o ficha técnica, por lo que la declaración que se realice en base a la información facilitada por el fabricante o proveedor, no es correcta.
Si sólo se dispone de una freidora, en caso de que un cliente indique que tiene alguna alergia o intolerancia, se deberá realizar la fritura en una sartén correctamente limpia y con aceite nuevo.
Algunos manipuladores de alimentos creen que los alérgenos son como las bacterias y el calor las destruye, lo cual es totalmente errónea, ya que puede suponer un grave problema para los comensales con alergias.
Las alergias al pescado, son producidas por unas proteínas altamente termoestables, principalmente parvalbúminas, tan resistentes al calor que no se modifican al cocinarlas o al freírlas, al mismo tiempo que son altamente resistentes tanto al ácido como la acción o digestión enzimática intestinal.
De nada sirve presentar declaraciones de alérgenos bonitas, de colores y con un diseño impecable, si luego la información sobre los alérgenos que contiene el plato no es real.
En general las declaraciones sobre alérgenos son estándar y están desactualizadas, no tienen en cuenta los procesos culinarios a los que son sometidos los alimentos, y en general los camareros desconocen los pasos que siguen los cocineros para elaborar los mismos.
Es imprescindible que las declaraciones sean revisadas cada cierto tiempo, y siempre que se añadan platos nuevos a la carta.
Según aconseja la Asociación Española de personas con alergia a alimentos y latex, se debe:
En el Laboratorio Alazor, le asesoramos para el correcto cumplimiento de la normativa vigente sobre alérgenos, elaborando declaraciones de alérgenos a medida de sus necesidades y realizando una formación personalizada para usted y su negocio.
1 Comment
necesito saber la rotacion del aceite en freidoras, por cuantsa raciones de pollo fritas, patatas, etc, es que necesito cambiar rl aceite de mi freidora, que norma controla o regula estos aspectos, para no dañar la salud de ningun cliente.